Al enriquecer el aire con Oxígeno o utilizar oxígeno puro, la combustión es más eficiente.
Esto permite incrementar el nivel de producción, disminuir el consumo de combustible y reducir el volumen de gases de combustión, en los procesos de fundición.
La tecnología se puede implementar en el procesamiento de materiales férricos y no férricos, así como en hornos que ocupan gas natural, combustible líquido o coke (hornos de cubilote).
Ventajas
- Se logra incrementar la capacidad de producción del horno (entre 20 y 40%).
- Se disminuye el costo de producción por Kg de material procesado (plomo, hierro, acero, vidrio, etc.)
- Se reduce el consumo de combustible (entre 25 y 35%), debido a un mejor aprovechamiento del poder calorífico de éste.
- Se reduce el volumen de gases de combustión, por la reducción en el ingreso de nitrógeno (del aire).
- Normalmente se utiliza el quemador (Aire-Gas), siendo mínima la inversión para la adaptación.
Aplicaciones
En procesos de combustión y fundición en hornos cuando:
- La capacidad instalada está saturada y se requiere incrementar la producción de metal líquido.
- Se requiere acortar el ciclo de fusión.
- Se requiere mayor temperatura de flama para el proceso de calcinación.